La normalización monetaria entra en foco en medio de baja liquidez, el yen sigue contenido
Puntos clave: USD/JPY cayó más de 1% en la semana, aunque el yen continúa cotizando cerca de mínimos históricos frente a monedas de mayor rendimiento como el dólar australiano (AUD) y la libra esterlina (GBP). Las recientes subidas de tasas y las minutas del Banco de Japón confirman un proceso...
USD/JPY cayó más de 1% en la semana, aunque el yen continúa cotizando cerca de mínimos históricos frente a monedas de mayor rendimiento como el dólar australiano (AUD) y la libra esterlina (GBP).
Las recientes subidas de tasas y las minutas del Banco de Japón confirman un proceso gradual de endurecimiento hacia 2026, pero los amplios diferenciales de rendimiento siguen sosteniendo la presión del carry trade contra el yen.
Las condiciones de negociación propias del periodo festivo, con baja liquidez, están diluyendo el impacto de las señales hawkish del BOJ, retrasando una recuperación más sólida y generalizada del JPY.
Resumen de mercado:
El yen japonés ha mostrado señales tentativas de estabilización, con el USD/JPY retrocediendo más de 1% en la última semana. No obstante, esta recuperación sigue siendo limitada y poco convincente, ya que la divisa continúa cotizando en niveles históricamente débiles frente a varios de sus principales cruces, en particular frente al AUD y la GBP.
Esta debilidad persistente se mantiene a pesar de un cambio claro en la trayectoria de política del Banco de Japón. La reciente subida de tasas y la publicación de las minutas, que reflejan un consenso entre los responsables de política monetaria a favor de nuevos incrementos en 2026, confirman que el país ha iniciado un proceso gradual de normalización monetaria. Este giro estructural marca un alejamiento de más de una década de política ultraexpansiva y, en el tiempo, debería contribuir a reducir el diferencial de tasas que ha penalizado al yen.
La desconexión entre este tono más restrictivo y el comportamiento aún débil del yen se explica, en gran medida, por factores estacionales. La negociación durante el periodo festivo se caracteriza por liquidez reducida y volatilidad contenida, lo que suele amortiguar la reacción del mercado ante cambios fundamentales. Además, aunque el BOJ ya ha iniciado su proceso de ajuste, los diferenciales de tasas frente a economías como Australia, Reino Unido y Estados Unidos siguen siendo muy amplios, manteniendo atractivas las estrategias de carry trade que presionan al JPY.
El Banco de Japón ha sentado las bases para un fortalecimiento del yen en el mediano plazo al comprometerse con una senda de subidas graduales. Sin embargo, la trayectoria de corto plazo sigue condicionada por la baja liquidez estacional y por un entorno global de rendimientos aún desfavorable. Una recuperación más clara y generalizada del yen probablemente requerirá el regreso de volúmenes normales de negociación, una implementación consistente del sesgo hawkish del BOJ y, de forma complementaria, un giro más dovish en otros grandes bancos centrales que acelere la convergencia de los diferenciales de tasas.
Análisis técnico
USD/JPY, H4:
El par USD/JPY ha retrocedido desde sus máximos de 2025, pero continúa mostrando resiliencia estructural, manteniéndose por encima del nivel psicológico de 156.00. Esto sugiere que el interés comprador de fondo sigue presente, sosteniendo al par dentro de su estructura alcista de mayor plazo. No obstante, la atención inmediata se centra en la resistencia de corto plazo en 156.60.
Un rechazo claro en la zona de 156.60 indicaría agotamiento del impulso alcista y podría dar paso a una nueva fase correctiva hacia el soporte en 155.50. Por el contrario, una ruptura decisiva por encima de 156.60 reforzaría el sesgo alcista de corto plazo y abriría el camino a un nuevo test de los máximos recientes.
Los indicadores de momentum reflejan este equilibrio. El RSI se mantiene consolidando cerca de su nivel medio, sin ofrecer una señal direccional clara, mientras que el MACD se aplana alrededor de la línea cero. Esta configuración sugiere una fase de consolidación, con compradores y vendedores sin un control dominante en el corto plazo.
El panorama inmediato dependerá del comportamiento del precio en torno a 156.60. Mientras no se produzca una ruptura clara, es probable que el par continúe operando en rango, con soporte en 156.00 y resistencia en 156.60.
Niveles de resistencia: 157.60, 158.80 Niveles de soporte: 154.35, 153.00