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El dólar retrocede mientras aumentan las apuestas de recorte de tasas de la FED

Puntos clave: Los débiles datos del ADP y la contracción del ISM manufacturero refuerzan las expectativas de recortes tempranos de tasas, manteniendo al DXY en trayectoria defensiva. La combinación de dólar débil, menores rendimientos y tensión geopolítica continúa impulsando al oro como refugio...


Puntos clave: 
  • Los débiles datos del ADP y la contracción del ISM manufacturero refuerzan las expectativas de recortes tempranos de tasas, manteniendo al DXY en trayectoria defensiva. 
  • La combinación de dólar débil, menores rendimientos y tensión geopolítica continúa impulsando al oro como refugio seguro y cobertura de cartera. 

Resumen del mercado:

 El Índice del Dólar estadounidense (DXY) extendió su retroceso a medida que los mercados intensifican sus expectativas de una trayectoria más dovish por parte de la Reserva Federal. Los datos recientes reforzaron la preocupación por una desaceleración del crecimiento en EE. UU.: el informe ADP mostró una sorpresiva caída de 32.000 empleos privados, muy por debajo de las previsiones, mientras que el ISM manufacturero descendió a 48,2, marcando contracción continua. Aunque el ISM de servicios subió a 52,6, el avance fue insuficiente para disipar las señales de enfriamiento económico.

La combinación de un mercado laboral más débil, un sector manufacturero en contracción y un desempeño desigual en servicios ha fortalecido la percepción de que la Fed podría verse obligada a iniciar recortes de tasas en la segunda mitad de 2025. Los rendimientos del Tesoro cayeron en respuesta, presionando aún más al dólar. El aumento de apuestas por recortes impulsó flujos hacia divisas de mayor beta y otros activos de riesgo, debilitando la demanda de refugio del billete verde.

Factores políticos también han añadido volatilidad. Comentarios recientes del presidente Donald Trump sobre cambios regulatorios, junto con la incertidumbre respecto a quién será el próximo presidente de la Fed, incrementan la falta de claridad en política monetaria. A nivel internacional, autoridades han advertido que una postura geopolítica menos predecible desde EE. UU. podría afectar a largo plazo el estatus del dólar como moneda de reserva.

En este escenario, el oro se ha beneficiado, operando cerca de máximos de varias semanas. La caída de los rendimientos, los datos débiles y un dólar más suave han fortalecido el atractivo del metal como activo defensivo. Además, la expectativa de un ciclo de recortes de tasas más acelerado hacia 2026 reduce el costo de oportunidad de mantener oro. La incertidumbre persistente —desde el conflicto Rusia–Ucrania hasta las tensiones en Medio Oriente— sigue promoviendo la demanda de refugio.

Mirando hacia adelante, la trayectoria del dólar y del oro dependerá de los próximos datos económicos de EE. UU., incluidos informes laborales, cifras de inflación y las señales oficiales de la Fed. Mientras las condiciones macro sigan apuntando a crecimiento más débil, política dovish y riesgos geopolíticos, el dólar probablemente permanecerá presionado, mientras el oro continúa encontrando soporte estructural.

Análisis técnico

DXY, H4



 El Índice Dólar mantiene una clara trayectoria bajista después de romper con fuerza la línea de tendencia ascendente que lo había sostenido desde inicios de octubre. Esta ruptura marca un giro significativo en la estructura del mercado, empujando al precio hacia la zona de 99,00–98,80, donde se observa una creciente presión vendedora. La incapacidad del índice para mantenerse por encima de 99,45 —y el posterior máximo descendente en 100,25— confirma el deterioro técnico. Ahora, la antigua línea de tendencia actúa como resistencia, mientras el precio se acerca al soporte de 98,50, inclinando el sesgo hacia mayores caídas.

Los indicadores respaldan esta visión bajista. El RSI cae hacia niveles cercanos a 28, mostrando condiciones de sobreventa pero sin señales de un giro claro. El MACD sigue profundamente negativo, con líneas de señal abriéndose a la baja y un histograma consistentemente rojo, lo que refleja momentum bajista sostenido. Sin estabilización en el RSI ni aplanamiento del MACD, el DXY podría tener dificultades para recuperar terreno en el corto plazo.

Niveles de resistencia: 99,00; 99,45
Niveles de soporte: 98,50; 98,00

GOLD, H4



 El oro continúa consolidando sobre su línea de tendencia ascendente, aunque su impulso ha perdido fuerza tras el rebote desde los USD 3.925 a mediados de noviembre. La zona de USD 4.235 ha frenado el avance, con velas de cuerpo reducido que evidencian indecisión cerca de esta resistencia. Aun así, la estructura general sigue siendo alcista mientras el precio se mantenga sobre la línea de tendencia que guía el movimiento desde octubre.

El RSI retrocede hacia 52, reflejando un enfriamiento moderado del momentum, mientras que el MACD muestra una señal alcista debilitándose: histograma reduciéndose y líneas convergiendo. Aunque aún no se completa un cruce bajista, el comportamiento sugiere que los compradores están perdiendo tracción y que el oro podría entrar en un período de rangos si no aparecen nuevas compras.

La perspectiva sigue siendo cautelosamente alcista, sostenida por la tendencia mayor. Sin un quiebre claro, es probable que el metal opere en un rango, con el sesgo de corto plazo dependiendo de la fortaleza de la tendencia ascendente.

Niveles de resistencia: 4.235,00; 4.370,00
Niveles de soporte: 4.220,00; 4.040,00

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