Si Pepa tiene 3.000 euros, ¿por qué debería compartirlos con el vecino? Si se los gasta en ponerse tetas, ¿acaso debe compartirlas con el vecino? Pepa se sobrevalora a sí misma pensando que en un mundo verdaderamente liberal viviría igual de bien. Pepa debería ser honesta consigo mismo y darse cuenta de que la empresa que le paga vive del BOE, que la empresa farmacéutica en la que invierte vive del BOE, y que la herencia que ha recibido de su padre (promotor en Villarrobledo) procede del BOE. Y así hasta el infinito.Pepa debería ser sincera con sigo mismo y preguntarse si es tan lista o tan guapa como para sobrevivir en un mundo sin intervención estatal. Ser verdaderamente liberal supone hacer un ejercicio de honestidad brutal con uno mismo y enfrentarnos a nuestras propias limitaciones. Ejercicio que a nadie nos gusta hacer porque al ser humano nos cuesta aceptar que no somos divinos de la muerte.La realidad es que hemos creado un sistema de intervención estatal del que todos dependemos en mayor o menor medida, en casi cualquier país. Básicamente porque hay que comprar la paz social. Y eso exige una financiación tremenda, que hasta ahora se conseguido hecho imprimiendo billetes y emitiendo deuda. Pero llega un momento en que la música deja de sonar y hay que pagar la fiesta. Y la realidad es que la fiesta la pagan los que realmente crean valor añadido, las clases trabajadoras cualificadas que pagan tipos impositivos de entre el 35%-50% para que los que viven de las rentas y que aportan mucho menos valor añadido paguen muchos menos impuestos. Todo porque las rentas de capital pueden deslocalizarse muy fácilmente.Y luego nos parece cojonudo que un youtuber que vive íntegramente de los usuarios españoles y de las marcas que venden en España (es decir, que viven del SISTEMA ultrakeynesiano español) se vaya a Andorra para no pagar impuestos en España.Esta discusión sobre las alzas de impuestos no es cosa solo de España, es algo mundial en estos momentos (impuesto mínimo global, quiebra de la libra por pasarse de listos, etc.). Lo propios altos directivos de las grandes multinacionales son cada vez más conscientes de que no queda otra solución y se está empezando a aceptar como algo inevitable en foros como la OCDE (nada sospechosos de ser comunistas), donde participan extraoficialmente esas grandes multinacionales. Pero vamos, igual es que en la OCDE no leen Rankia.