Una de las cosas difíciles o mejor dicho tratar de traspasar los conocimientos contables a aquella persona que se hace llamar “alumno en práctica”
En la actualidad, hay que ser realista, son pocas las empresas que toman en consideración al practicante, solamente lo solicitan para tenerlo como el “joven de los mandados”, es aquel, que solamente ordenara los documentos legales, confeccionara las planillas, ira de trámite ante instituciones fiscales y/o privadas. Al final el joven no aprende nada.
La practica debe ser lo fundamental para esta persona, nosotros debemos dar al practicante todas las herramientas necesarias para que entienda de que se trata, desde la partida doble (lo más fundamental) y de ahí ir explicando que la teoría es una cosa bien bonita pero jamás realista, por ende, nosotros somos quienes debemos de orientarlos y explicar la realidad de la situación contable, financiera y administrativa. Dar las pautas necesarias, entre estas:
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Conocimiento contable, eso sí, a un nivel que la persona entienda.
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Conocimiento de ERP y dar a entender que existe muchos más y que la gran mayoría son pequeñas las características en que cambian.
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Eso sí, también hay que recordarles que no solamente estamos en la oficina sino también se realizan trámites ante instituciones públicas y privadas.
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Enseñar a cumplir con el horario establecido.
Hay que tener presente, que ellos al final serán el futuro y lo más importante representa a los contadores, auditores u otra carrera ante las empresas que los contraten y si no tienen un buen pilar o cimiento, siempre uno les pregunta donde realizaron la práctica.