Las acciones se generan cuando una empresa decide cotizarse en la bolsa de valores, para ello debe generar fracciones que resultan de la división del valor total de la empresa entre el número de acciones, de ésta manera si una empresa tiene un valor de 200 millones de dólares y ofrecen 100 mil acciones, el valor de cada una será de 2 mil dólares cada una. Por supuesto mientras más elevado es el monto de la acción menos accesible es para cualquier tipo de inversionista. La pregunta que nos podemos hacer entonces al invertir en una sociedad, es: ¿Cómo calcular el beneficio o ganancia por acción?
¿Qué es la Ganancia por Acción?
La ganancia por acción, es un ratio muy utilizado en el mundo de las finanzas, nos ayuda a determinar un tema muy relevante y en cuyo desarrollo explicaremos cual es.
Cabe destacar que el dinero proveniente de la venta de las acciones generalmente es usado para nuevas inversiones y el desarrollo de nuevos modelos de negocios los cuales condicionan la rentabilidad de las mismas, ya que depende del éxito que tengan para dar o no beneficios a sus accionistas.
Los interesados en la adquisición de acciones deben saber que el dinero destinado para tal fin debe pertenecer a un excedente o al menos a dinero que no se requiera para cubrir gastos de primera necesidad, ya que debe esperarse un tiempo prudencial para la recepción de los beneficios y sino debe venderse la acción para recuperar el dinero. Invertir en acciones siempre será una buena estrategia para aquellos que más que ahorrar quieren multiplicar su dinero, por supuesto que existe un riesgo implícito por lo que es prudente tener buenos conocimientos de base para iniciarse en ésta actividad.
¿Cómo calcular el beneficio o ganancia por acción? Desarrollo
Hay que tener presente que la ganancia por acción corresponde a la división de la ganancia de la sociedad a evaluar con respecto a la cantidad de acciones en circulación en ese momento (el de la evaluación). Sin embargo este concepto presenta diversas variaciones que explicaremos más adelante.
Un ejemplo en el primer caso, sería decir por ejemplo, que las ganancias de la sociedad “X” son de $10.000, y las acciones en circulación son 1.000, en este caso la ganancia por acción sería de $10, quiere decir que a cada acción se le atribuye una ganancia de $10.
Sin embargo, si se realiza un aumento de capital, se va a considerar la cantidad de acciones promedio, tomando el mismo ejemplo anterior y considerando los mismos datos, asumamos que en Mayo la empresa emite 1.000 acciones nuevas, en este caso, para el cálculo de las acciones promedio tendríamos que considerar lo siguiente “1.000 acciones de la primera emisión + 1.000*8/12 (que conciernen a los meses de Mayo y Diciembre sobre una media de 12 meses)”, el resultado nos da la suma de 1.667 acciones aproximadamente, para este cálculo la ganancia por acción asciende a la suma de $5,99 por acción, al haber más acciones en circulación, el número disminuye.
Ahora es también importante mencionar para que nos sirve la ganancia por acción en este mundo de las inversiones, ya sabemos que en un primer lugar esto determina la proporción de ganancia para cada acción, pero esta información va un poco más allá, la ganancia por acción se utiliza para especular en análisis fundamental, nos sirve para comparar con otras empresas si la ganancia es la acordada, nos sirve para establecer políticas de dividendos, y lo más importante, es un ratio fundamental para evaluar si la acción esta subvaluada o sobrevaluada, utilizando este resultado, se compone para trabajar a futuro con el PER (Price to Earning Ratio) que es el ratio que nos ayuda a evaluar la sub o sobre valoración de un ratio y que veremos en otro blog.
Por supuesto, que para definir el verdadero beneficio de las acciones, las empresas deben tener una contabilidad transparente que le permita a sus accionistas visualizar los beneficios y de ésta manera corroborar que los obtenidos correspondan con los números de los libros. Por lo general, solo se publican un conjunto de tablas, previamente revisadas y evaluadas por las partes competentes y de allí se procede al tomar los datos para realizar los cálculos.
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