Los bienes son aquellas cosas, materiales o inmateriales, que pueden ser usados por una persona o un grupo. En su mayoría, los bienes son producidos por la industria, para ser distribuidos a los consumidores a través del mercado. Sin embargo, no todos los bienes tienen esta finalidad. Es por esto que se establece la diferencia entre bienes públicos y privados. Pero, ¿cuáles son los bienes públicos y privados?
Bienes públicos y privados - ¿Qué son?
Como mencionamos al principio, los bienes pueden tangibles o intangibles y corresponde a todo aquello que una persona o grupo puedan usar. Dentro de esta definición se clasifican dos grandes grupos: los bienes públicos y los bienes privados:
- Los bienes públicos son todos aquellos bienes de uso cuyo consumo es indivisible, es decir, pueden ser usados por cualquier persona sin importar su nivel económico, estatus social, sexo, nacionalidad, religión, etc., sin exclusión.
- Los bienes privados son aquellos que adquiere una persona a través de una compra, impidiendo que otra persona acceda a ellos, es decir, privatizándolo o particularizando su uso.
De esta manera, los bienes públicos son aquellos cuya creación ha sido propiciada por el Estado para el bienestar común ya que, al no ser comerciales ni generar ganancia, no son rentables y por lo tanto ninguna empresa se dedicaría a la producción de bienes públicos a menos que el estado intervenga y le pague por ello. Por ejemplo, ninguna empresa dedicaría de sus recursos a colocar alumbrado público solo para el bien de la comunidad ya que, al no ganar nada por ello, representaría su quiebra. A esto se le conoce como fallo del mercado.
Por otra parte, los bienes privados son excluyentes, por lo que la persona paga para adquirirlos, lo que resulta rentable para el fabricante, productor o distribuidor y crea lo que se conoce como mercado.
¿Cuáles son los bienes públicos y privados?
Una forma de definir la diferencia fundamental entre los bienes públicos y los privados es que, mientras el uso de un bien público no le impide a otra persona usarlo, como una carretera o pasear por un parque público, el uso de un bien privado sí lo hace, de manera que cuando adquirimos este bien a través de la compra le impedimos a los demás usarlo por lo que se convierte en una propiedad de quien lo ha adquirido, como por ejemplo una entrada de cine o un auto.
Esta diferencia es la base del comercio y el mercado, ya que la existencia del mismo implica que habrá consumidores que adquieran bienes privados cuyo uso sea excluyente una vez adquiridos. Por ejemplo, cuando una persona va a una tienda de ropa y compra una prenda la convierte en un bien público, que fue creado para esa finalidad, y excluye a todos los demás de usar esa prenda. Sin embargo, cuando esa persona sale a la calle, se sienta en un banco de la plaza pública, donde ya hay alguien más sentado, haciendo así uso de un bien público.
Con esta comparación podemos determinar que el mercado es el encargado de distribuir bienes de consumo a fin de que estos se conviertan en bienes privados. Mientras que los bienes públicos son construidos y establecidos con el fin de proporcionar un bien común para cualquier ciudadano sin excluir de su uso a los demás.
Otra diferencia entre los bienes públicos y los bienes privados es que los primeros son inalienables e intransferibles, mientras que los bienes privados son una fuente de ingresos cuando se enajenan. Además, un bien público no necesita un título de propiedad y es administrado por el Estado, mientras que un bien privado sí.
Tipos de bienes públicos y privados
En este punto debemos definir que existen 4 tipos de bienes:
- Bienes públicos puros: Son aquellos en los que no se puede excluir a nadie de su uso y que no tienen rivalidad, es decir, el uso de una persona no disminuye su uso para los demás. Por ejemplo, el alumbrado público o la Defensa Nacional.
- Bienes públicos no puros, o monopolios naturales: Son bienes excluibles por el pago de un precio, pero no rivales ya que su uso no merma el de los demás. Por ejemplo, el internet, películas pagas, etc.
- Recursos comunes: Son bienes no excluyentes, es decir, todo el mundo los puede usar, pero rivales ya que su uso merma el uso que los demás puedan darle. Por ejemplo, los peces del mar, los recursos naturales, etc.
- Bienes privados: Por último, los bienes privados son tanto excluyentes como rivales ya que su adquisición impide a otra persona usarlo y a la vez reduce el consumo que otros puedan hacer de él. Por ejemplo, la ropa, una casa, un auto, un alimento.
En resumen, los bienes públicos y privados constituyen todo lo que una persona pueda usar, ya sea tangible o intangible, y su naturaleza determina qué tanto acceso tiene a dicho bien y qué tanto se le puede excluir. En ambos casos, tanto los bienes públicos como los privados tienen su grado de exclusión y su grado de rivalidad, lo que determina la naturaleza intrínseca del mismo.