Buenas tardes Atiza, como vulgarmente se dice, "no te has enterado de na", me explico:
Lo que me he venido referir, es que un trabajador asalariado esta limitado a un sueldo y a sus correspondientes retenciones de IRPF y a las correspondientes cuotas de la seguridad social, un asalariado esta a merced totalmente del estado, como mucho tiene derecho a manifestarse y poco más. Por contra a un autónomo las cosas le pueden ir bien o mal, si le van mal, en términos generales estará en una situación bastante peor que un asalariado, ahora bien, si los negocios le funcionan correctamente, eres perseverante, estricto y piensas en tu futuro, a largo plazo no dependerás de las limosnas del estado. A todo esto lo que me venia a referir es que cuando te haces autónomo estas aumentando el riesgo en favor de tener la posibilidad de unas mayores ganancias, y repito posibilidad, ya que no hay nada garantizado. Ahora imagínate que consigues dichas ganancias a costa del riesgo asumido y que te has planificado una jubilación acomodada, y resulta que por un cambio de ultima hora del gobierno en tus últimos años te cambian las reglas del juego, es totalmente injusto, ya que te la has estado jugando por obtener algo mas que luego papa estado te va a requisar.
No se si ahora me has entendido, porque en vista de tu primera respuesta me ha quedado claro que antes no me has entendido, ya que ni si quiera he dicho en ningún momento que a mi me vaya bien...
Por otra parte y ya cambiando del tema original, te puedo decir que en el 90% de los casos a largo plazo cada uno tiene lo que se merece. Creo que este no es el lugar para comentarlo, tal vez seria mejor hacerlo en el foro de autónomos, pero por mi parte no tengo ningún problema en hacer un breve repaso de toda mi historia como autónomo, donde luego podríamos debatir sobre si compensan o no los sacrificios, y donde podríamos valorar hasta que punto puede afectar el factor suerte. Te lo digo sinceramente y sin malos royos.
Un saludo.
