Muchísimas gracias por tu generosidad, Solrac. Somos muchos los que desde la humildad del que sabe que poco tiene que aportar (de momento, esperemos) aprendemos en silencio gracias a gente como tú que explicáis y compartís vuestras experiencias y conocimientos sin enredar, embaucar ni daros importancia.
Una pena que otros antes que tú hayan dejado de hacerlo por los ruidosos ensucia-hilos de turno. No les hagáis ni caso por favor, que yo creo que somos mayoría los agradecidos con ganas de aprender. Hacemos menos ruido, eso sí, pero estamos.