Tal vez John Kennedy no tuvo intención de hablar sobre el ciclo bursátil, sin embargo, resumió el concepto con la siguiente frase: “la Bolsa es un juego que consiste en ir pasando de unos a otros una cerilla encendida, hasta que llega a uno que se quema los dedos”.
En esta oportunidad estudiaremos los conceptos de ciclo económico y ciclo bursátil, y su utilidad para reconocer el activo indicado para cada momento.
Definiendo el ciclo económico
Los periodos de bonanza económica son sucedidos por períodos de decaimiento o recesión. De acuerdo a Burns y Mitchell (1946):
[Los ciclos económicos son una forma de fluctuación, que se encuentra en la actividad agregada de los países, que organizan su trabajo en compañías: un ciclo consiste en expansiones que ocurren al mismo tiempo en múltiples sectores y actividades económicas, seguidas de recesiones de igual modo generales, contracciones y recuperaciones que se funden con la fase expansiva del siguiente ciclo]
Entonces, un ciclo económico corresponderá a los ascensos y descensos de la actividad económica medida, por ejemplo, a través del producto interno bruto (PIB).
Los ciclos son resultados de perturbaciones aleatorias que impactan en el sistema económico y desencadenan un comportamiento cíclico.
Los ciclos son recurrentes en la historia, porque siempre han existido nuevos impulsos que perturban el equilibrio de una economía. Estos impulsos se propagan a través de las estructura del sistema económico. Podemos distinguir tres categorías de impulsos:
- Los shocks de oferta que impactan directamente en el lado de la producción, donde encontramos factores como avances tecnológicos, cambios climáticos, desastres naturales, descubrimientos de recursos naturales, variaciones en los precios internacionales de las materias primas, entre otros.
- Los shocks del sector gubernamental, que son consecuencia de decisiones tomadas por las autoridades económicas e influyen directamente del lado de la demanda agregada como las variaciones en la política monetaria, la fiscal y la cambiaria.
- Y los shocks de demanda privada: que corresponde a los movimientos en la inversión o el consumo del sector privado que pueden provocarse por cambios en las expectativas sobre la economía.
La duración media de un ciclo es de cinco años. Los ciclos económicos se componen de secuencias reiteradas de expansiones y contracciones. Una contracción se define como el período de tiempo que transcurre entre un máximo y el siguiente mínimo. Todo período que no pertenece a la contracción se denomina expansión.
La amplitud de la expansión (contracción) se mide como la variación entre el mínimo (máximo) y el siguiente máximo (mínimo) como desviación porcentual de la tendencia. Por último, la duración de una contracción (expansión) se define como el número de trimestres transcurridos entre un máximo (mínimo) y el siguiente mínimo (máximo) de la serie sin tendencia.
Grafico 1. Ciclo sin tendencia.
Las flechas rojas denotan la amplitud de un ciclo respecto a la tendencia, mientras que las flechas negras la duración en años.
Grafico 2. Ciclo con tendencia.
Para el sector gubernamental es importante conocer el ciclo económico porque de esta manera se puede estudiar y ejecutar la planificación económica de corto, medio y largo plazo. La observación del comportamiento histórico de un determinado fenómeno permite prever tendencias recurrentes en el tiempo, contribuyendo así a la aplicación de estabilizadores con el objetivo de suavizar las oscilaciones cíclicas y garantizar un crecimiento económico equilibrado y sostenible.
Del mismo modo, el reconocimiento del ciclo económico y su influencia en los mercados también es importante, para las empresas y para el sector financiero.
Interrelación entre el ciclo económico y el ciclo bursátil
Si el ciclo económico determina la pauta general de la actividad económica de un país, el ciclo bursátil hace lo suyo en la bolsa. El ciclo bursátil se suele adelantar a los ciclos económicos, porque se mueve por expectativas. Por tanto, las expectativas de la economía real futura, lleva a adelantar entre seis y doce meses el movimiento del ciclo bursátil.
Gráfico 3. Ciclo económico y ciclo bursátil.
Ciclo bursátil y sus componentes
El ciclo bursátil corresponde a la evolución en el tiempo, de las cotizaciones de los activos financieros, en los cuales, se producen fases de crecimiento, expansión y fases de decrecimiento. Si en el mediano-largo plazo las cotizaciones suben, estamos en presencia de un mercado alcista o “Bull Market”, en caso contrario, ante un mercado bajista o “Bear Market”. Si no hay una tendencia clara, estamos ante un mercado lateral o de transición.
Tendencias en el ciclo bursátil
Las cotizaciones de acciones se mueven según tendencias. Una tendencia corresponde a la persistencia de una evolución del precio, ya sea al alza o a la baja. Podríamos clasificar estas tendencias en tres grupos:
- Primaria: duración mínima de un año y explica casi la mitad de las variaciones de las cotizaciones.
- Secundaria: una tendencia primaria al alza está compuesta de al menos tres tramos alcistas, interrumpidos por al menos dos tramos bajistas. Cada uno de estos tramos secundarios tiene una duración entre uno y diez meses. Cada piso de una corrección secundaria queda por encima del soporte de la corrección anterior.
[Soporte es un nivel de precio por debajo del actual. Se espera que la demanda supere a la oferta, y por lo tanto, el precio deberá aumentar. Un soporte corresponde a un mínimo alcanzado anteriormente.]
- Menor: cada tendencia secundaria está compuesta de movimientos menores los cuales tienen una duración máxima de un mes.
Grafico 4. S&P 500 desde el 01 de marzo de 1993 hasta el 07 de abril de 2017.
La flecha negra denota un ciclo completo con tendencias primarias al alza (flechas azules) y tendencias primarias a la baja (flechas rojas).
Tendencia primaria alcista
A continuación detallaremos las fases y características de las tendencias primarias.
- Fase de Acumulación
La economía del país se encuentra en recesión o crisis. Los beneficios de las empresas son bajos o negativos, el sentimiento empresarial es pesimista y el desempleo es elevado. La inflación es baja producto del descenso en la actividad económica.
En la bolsa el panorama no es mejor: el público general ha experimentado pérdidas. La actividad bursátil es baja y el volumen contratado es mínimo.
Los inversionistas institucionales (administradoras de fondos, corredores de bolsa, bancos, etc.) se dan cuenta que la economía ha tocado fondo, y por tanto, es probable experimentar una reactivación en el corto y medio plazo. Por otra parte, los precios de los activos financieros han descendido por debajo de su verdadero valor, y se abren oportunidades de inversión. Se activan muchas órdenes de compra y la bolsa cobra interés para los inversionistas institucionales y profesionales.
- Fase de liquidez
El sector gubernamental hace intentos por reanimar la economía y comienza a llevar a cabo medidas de política económica. En esta fase la tasa de inflación sigue siendo baja y sumado a una política monetaria expansiva dará lugar a tipos de interés nominales bajos. La opción de contraer créditos para los empresarios es muy favorable. Se financian muchos proyectos de inversión.
La fuerte caída de los tipos de interés reduce la rentabilidad de la renta fija y esto da lugar a que los inversionistas consideren más atractiva la opción de invertir en acciones. Ya que los inversionistas institucionales, profesionales y público en general, vendieron la mayor parte de sus activos antes de la “bajada fuerte” del ciclo anterior, comienza una etapa de relativa escasez de acciones por un aumento en la demanda, lo que hace subir el precio de las acciones.
- Fase fundamental
En términos de la economía real, es posible que la inflación y los tipos nominales sigan bajos. Sin embargo, en esta etapa los indicadores de valor de las empresas mejoran: se evidencia aumento en las ventas, los resultados financieros son positivos, mejora la rentabilidad de las empresas y el uso de los activos está en plena capacidad.
En la medida que la economía real se recupera, hay más inversionistas dispuestos a ingresar a la bolsa. En esta etapa comienza a invertir masivamente el público general.
- Fase especulativa: el inicio del fin
Se caracteriza porque la reactivación económica se ha consolidado, el país vive una sensación de prosperidad. Sin embargo, el gobierno se preocupa por el alza de la inflación. Por otro lado, aumenta el costo salarial (debido a la inflación) y el costo se traslada al precio de los productos y servicios. Finalmente se encarecen los bienes y servicios, y en consecuencia, se estrechan los beneficios empresariales.
El tipo de interés nominal comienza a subir, debido a la alta demanda de crédito para emprender proyectos e invertir en la bolsa.
La bolsa experimenta un boom en donde participa todo tipo de inversionista. El mercado lleva por lo menos tres años al alza. Los inversionistas institucionales comienzan a detectar problemas en el sostenimiento de buenos resultados empresariales, además, están preocupados por la disminución en la rentabilidad real de las acciones, y por tanto, comienzan a vender.
Tendencia primaria bajista
- Fase de fuerte descenso
Se caracteriza por la venta masiva de acciones por parte de los especuladores e inversionistas institucionales. Se acaba la tendencia lateral y predomina la caída de los valores, sobre todo, de aquellas inversiones con mayor riesgo. Los inversionistas menos expertos (público general), suelen mantener su posición debido a los sesgos de comportamiento de masa.
- Fase de “goteo”
El aumento de la inflación pone en marcha planes del gobierno que tienden a reducir la actividad económica, aumentando el tipo de interés nominal. Por otra parte, aumenta el desempleo y la actividad empresarial se reciente aún más, dado que disminuyen sus ingresos por venta, experimentando en muchos casos pérdidas.
Muchas inversionistas irán liquidando sus inversiones poco a poco, en la medida que requieran liquidez. Estas ventas dan origen a la denominación de fase de “goteo”, ya que es el público general quien vende lentamente sus inversiones.
En qué puedo invertir dependiendo de la etapa del ciclo bursátil
Tendencia Primaria Alcista:
- Fase de acumulación, liquidez y fundamental. Invertir en acciones de empresas con Beta elevado y en sectores relacionados al ciclo económico: extracción de materias primas, construcción, consumo (básico y discrecional), financiero y energía.
- Especulativa o declive. Vender posiciones en acciones del sector financiero. Dado que esta etapa inicia el aumento de los tipos de interés nominal, la renta fija se convierte en una alternativa atractiva.
Buena semana de inversiones.
Sergio Pérez Acevedo.