Los seguros de vida son pólizas que ofrecen una indemnización por la totalidad del capital asegurado, o una parte de él, a los beneficiarios del asegurado en caso de su muerte o de quedar incapacitado permanentemente. A este respecto, el asegurado tendrá ciertas libertades para escoger a quiénes agregará en el seguro. A continuación destacaremos, ¿quién es el beneficiario de un seguro de vida?
¿Quién es el beneficiario de un seguro de vida?
Un beneficiario es aquella persona designada por el tomador de un seguro de vida, la cual podrá tener el derecho a recibir la indemnización por la suma asegurada en caso de fallecimiento del asegurado, o de que quede en incapacidad permanente, en el caso de los seguros de vida que cubren esta eventualidad.
El tomador podrá hacer la selección del o los beneficiarios al momento de firmar la póliza con la aseguradora o en una fecha posterior. Incluso puede cambiar uno o más beneficiarios de la póliza en cualquier momento de la vida del seguro.
El o los beneficiarios de un seguro de vida suelen ser personas que comparten un vínculo común de intereses personales, familiares o económicos con el asegurado, los cuales reciben el capital asegurado en los casos que se ejecute la cobertura del seguro de vida. De manera que, básicamente, un beneficiario puede ser cualquier persona designada por el tomador del seguro, incluso si esta no tiene aparente relación con el asegurado.
A este respecto, es necesario señalar la diferencia entre tomador y asegurado:
- El tomador del seguro de vida es aquel que suscribe la póliza y tiene la responsabilidad del pago de las primas. Tiene la potestad de escoger a los beneficiarios del seguro, escoger o modificar coberturas adicionales, modificar a los beneficiarios, el domicilio, la forma del pago de las primas, rescindir el contrato, etc. No siempre el tomador del seguro es la persona asegurada.
- El asegurado es la persona cuya vida es la base del contrato, y por quien se pagará a los beneficiarios en caso de que muera. Esta persona tiene la obligación de salvaguardar su seguridad a fin de no invalidar el contrato y que su muerte caiga en las exclusiones, así como tiene derecho a conocer todo lo relacionado con la póliza, incluyendo quiénes son los beneficiarios del seguro de vida.
De manera que como no siempre el tomador del seguro y el asegurado son la misma persona, a quien le corresponde designar quiénes serán los beneficiarios del seguro es al tomador. En caso de ser la misma persona, será ella la que asuma las obligaciones y goce de los derechos de ambas partes, entre ellas escoger a sus beneficiarios y tener la potestad de modificarlos en cualquier momento.
Los beneficiarios de un seguro de vida pueden ser expresados en la póliza de manera expresa, es decir, con nombres y apellidos, o designarlos de manera genérica según el parentesco que ostenten al momento de la muerte del asegurado (cónyuge, hijos, hermanos, herederos legales, sobrinos, etc.). En caso de que el asegurado muera sin haber establecido a sus beneficiarios, se aplicarán las condiciones del contrato establecidas a tal fin, las cuales designan a los beneficiarios en orden de consanguinidad, comenzando con los hijos, luego los padres del asegurado, o en su defecto a los herederos legales del mismo.
Un último detalle es que el asegurado puede tener más de un seguro de vida si así lo desea, siempre que el tomador los contrate, y si son la misma persona simplemente podrá contratar cuantos seguros desee tener, y designar en cada uno beneficiarios diferentes.
Ahora ya sabes un poco más sobre quién es el beneficiario de un seguro de vida y las condiciones que se aplican a la hora de seleccionarlos. Si eres beneficiario de un seguro, tendrás la obligación de presentarte ante la aseguradora para que esta verifique tu derecho a recibir la indemnización convenida en la póliza.