Cómo afecta la inflación a nuestros ahorros?, es una pregunta que muchos se hacen y más cuando la inflación llega a ubicarse al alza. Si quieren conocer los aspectos de cómo la inflación afecta los ahorros y cómo estar alerta a ciertos datos, este artículo es para ustedes.
¿Cómo afecta la inflación a nuestros ahorros?
Uno de los principales indicadores por el que debemos guiarnos es por el dato de la inflación, siendo que precisamente la inflación refleja cómo se mueven los precios de alimentos, productos, bienes y servicios y cuán alto o bajo es el costo de vida.
¿Qué es la inflación?
Algunos definen a la inflación, como el aumento sostenido y generalizado de precios de alimentos, productos, bienes y servicios de una economía a través del tiempo. Cada mes se da a conocer el dato de cómo evolucionaron los precios de alimentos, productos, bienes y servicios que a su vez conforman una canasta familiar básica de productos y alimentos, siendo estos un conjunto de productos que tienen una mayor importancia en el consumo diario de las familias, y muestra cuánto cuesta adquirirlos cada mes.
En base al valor de la canasta familiar permite establecer el Índice de Precios al Consumidor (IPC), y conocer el IPC del mes y también comparativamente con el dato del mismo mes del año anterior. Cuándo los precios aumentan-sin importar en qué porcentaje- existe inflación y si los precios caen, se da una deflación.
La suba de precios-inflación- es el principal enemigo del ahorro, ya que es la misma inflación la que evita ahorrar o frena el ritmo de ahorro y hace perder valor al dinero. Por lo que, siempre se quiere ahorrar, pero no siempre se puede y cuándo hay inflación es cuándo más cuesta ahorrar.
La inflación y el efecto sobre los ahorros
Cuando los precios suben y suben, la inflación es otro factor que evita y perjudica la capacidad de ahorro, ya que si el aumento de precios es muy pronunciado, uno tiende a pensar -y a veces con razón- que es mejor comprar ahora tal o cual producto porque luego seguirá subiendo, por lo que estamos utilizando más dinero para comprar la misma cantidad de productos -es cuándo se da la pérdida de valor del dinero- que antes pero más caro y a la vez esa parte del dinero que iba al ahorro, la estamos utilizando para comprar dichos productos a un mayor precio que antes.
Y no solo estamos hablando del aumento de alimentos y productos, la inflación también significa suba de tarifas en servicios como los servicios básicos de la vivienda, luz, gas, agua, cable hasta los costos de mantener un vehículo, y los costos que nos cobra en banco, además de los de la salud y demás que uno tenga en su vida diaria.
La suba de los costos antes mencionados, repercute negativamente en la capacidad de ahorrar, ya que cada vez tenemos que utilizar más dinero para lo mismo que antes y sin poder ahorrar o sin hacerlo en el mismo nivel que antes. De esta manera, debemos hacer un cálculo de la rentabilidad de la inversión muy fino.
Con una determinada cantidad de dinero, hoy no compran la misma cantidad de productos que el mes anterior, a partir del aumento de precios, lo que permite ver como pierde valor el dinero ya que con la misma cantidad de dinero, no les alcanza para comprar los mismos productos que compraban antes.
¿Puedo ahorrar a pesar de la inflación?
Ahorrar casi siempre se puede, depende también de la capacidad económica de cada familia si en tiempos de inflación alta pueden ahorrar algo o nada. Pero aquellos que hasta pueden pensar en hasta invertir algo de sus ahorros pueden invertir en:
- Un producto de ahorro asociado al Índice de Precios al Consumidor (IPC), algún producto en UF, y cuando varía, los ahorros suben a la par de la inflación.
- Otra opción es invertir en un producto de ahorro cuya tasa de interés efectiva no esté por debajo del IPC, lo que evita que se desvalorice el dinero por la inflación.
En un contexto inflacionario, nos debatimos entre consumir el dinero antes de que pierda su valor, o ahorrarlo sin la certeza de que mantenga su poder adquisitivo en el futuro. Si nos decantamos por la segunda opción, debemos asegurarnos una tasa efectiva de retorno a lo largo del tiempo que sea superior a la tasa de inflación acumulada en ese mismo periodo.